Lejanía,
eso somos.
El silencio nos llama
y la indiferencia nos gobierna.
Golpeo a mi pecho
más fuerte que los latidos,
porque no quiero que me recuerden
el amor que se esconde.
Maldito corazón cobarde,
malditos latidos que son tan débiles,
tengo coraje de no ser valiente.
Pesadilla,
así le llamó a mi realidad sin ti.
Eres un sueño
que persigo como la ilusión de la luz de la luna
en nuestros cuerpos,
nos toca, pero no entra en nosotros,
porque solo es una visión, un reflejo,
no es una sensación que nos haga compartir de su magia.
Mi amor no es un cuento de hadas,
si lo fuera, tú estarías aquí.
Me he quitado las zapatillas
porque es cansado caminar en un camino
que no me lleva a ningún lugar.
Voy hacia a ti
cuando no estás allí.
Voy hacia a ti
en un tiempo equivocado
que no nos permite ser.
Voy hacia a ti
y tú vienes hacia a mí
al mismo tiempo,
pero por otros caminos
y no nos encontramos.
Huimos de los corazones que nos aman
pero necesitamos de los abrazos
que enamoran a nuestras almas,
es el mismo lugar,
pero queremos algo más
hasta que nuestro deseo
no signifique nada.
Golpeo a mi pecho tan fuerte
para que el amor duela
y yo quiera arrancarme el corazón.
Golpeo a mi corazón
con la esperanza
de ese algún día
que tú beses mis latidos
y todo tenga sentido.
Yo solo escribo, mi historia y tu interpretación de la poesía pueden ser distintas, pero siéntete libre de compartirme tu interpretación, opinión, la frase que más te haya gustado o lo que quieras en los comentarios. Gracias por leerme.
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